El equipo de gobierno ha aprobado en solitario en un pleno extraordinario una actualización de los impuestos que ha asegurado que es muy ajustada. Donde realmente se percibirá será en el IBI, que subirá en un 3,86 por ciento con una subida media en el recibo de 28 euros. Estas medidas fiscales junto a la renegociación de la deuda de 100 millones con la Junta han sido necesarias para poder adherirse al fondo de ordenación de las entidades locales con un nuevo plan de ajuste. El objetivo, conseguir 18 millones de euros para pagar sentencias judiciales de carácter urbanístico.